2016
Los pronósticos de los modelos climáticos para Bolivia son de un significativo aumento de temperatura de hasta 7 °C hacia finales de siglo. Entonces surge la pregunta, ¿qué está haciendo Bolivia para enfrentar los impactos de semejante aumento de temperatura?
Para dar respuesta a este interrogante, en el estudio “Navegando futuro. Dos experiencias de adaptación al cambio climático en Bolivia” he analizado políticas, programas y proyectos de adaptación al cambio climático en dos regiones de Bolivia: el Altiplano norte y el departamento del Beni.
“La adaptación al cambio climático en Bolivia está todavía en sus inicios y aún no existe una conciencia generalizada de que la adaptación es una prioridad para los próximos años y décadas”, es una de las conclusiones principales del estudio “Navegando Futuro. Dos experiencias de adaptación el cambio climático en Bolivia” encargado por la Fundación Friedrich Ebert (FES) en La Paz, y realizado por mi persona.
En la medida en que los impactos del cambio climático en Bolivia son cada vez más notorios, se hace cada vez más importante el estudio y el debate en torno a la adaptación al cambio climático (ACC).
Sin embargo, la mayor parte de los trabajos nacionales sobre este tema relatan experiencias individuales y aisladas; hace falta una sistematización y un análisis más profundo del lugar en el que se encuentra Bolivia, en todos sus niveles político-administrativos, respecto al objetivo de adaptación a los impactos del cambio climático.
En este contexto, “Navegando futuro” presenta un estudio empírico sobre políticas, programas, proyectos e iniciativas de adaptación al cambio climático en dos regiones distintas de Bolivia: el Altiplano norte y el departamento del Beni, escenario de las inundaciones “históricas” de comienzos de 2014, ambas regiones muy vulnerables al cambio climático.
Además del estudio publicado en forma de libro, se ha elaborado un documento de propuesta de política pública (policy paper) para comunicar los principales hallazgos y recomendaciones a una audiencia más amplia. A continuación presentamos un resumen de este documento corto dirigido a tomadores de decisión en los ámbitos de desarrollo social e económico.
Sistema de agua potable en el Altiplano norte
En el presente vivimos en un mundo nuevo y desconocido, con un clima en constante cambio.
Con la actual trayectoria de emisiones, el mundo se encuentra en camino a un calentamiento global promedio de más de 4 °C hasta fines del siglo – cifra que casi se duplica para el territorio boliviano. Algunos investigadores han señalado que las medidas de adaptación que serían apropiadas para un aumento de 2 °C, con un aumento de 4 °C podrían ser completamente insuficientes. Adaptarse a un mundo de cuatro grados más caliente será un proceso sustancial y transformacional.
Con un aumento de temperatura de 4 °C, Bolivia será otra ya en pocas décadas. Los desafíos para el país comienzan con la necesidad de asumir la magnitud del reto que significa el cambio climático para la adaptación, que todavía no está siendo plenamente entendida.
La coyuntura económica actual constituye un impedimento para la adaptación al cambio climático en el área rural.
La bonanza económica experimentada actualmente en Bolivia tiene múltiples impactos en relación al cambio climático y más específicamente respecto a la adaptación. Por una parte, está disminuyendo la dependencia económica relacionada a las actividades agropecuarias de los pequeños productores, sobre todo en el Altiplano y los Valles. En consecuencia, eventos meteorológicos adversos, como suelen estar en aumento con el cambio climático, aunque tengan los mismos efectos, ya no impactan en las economías de las familias rurales de la misma manera. Se puede decir que la diversificación de fuentes de ingreso a sectores no directamente relacionados al clima se convierte en estrategia de adaptación.
No existe una política nacional de cambio climático.
Actualmente, Bolivia no cuenta con una política nacional de adaptación al cambio climático, tampoco con estrategias de adaptación o mitigación. Recién con la conformación de la Autoridad de la Madre Tierra (APMT) en marzo de 2014, se ha retomado el tema de la adaptación al cambio climático en el marco del ejercicio en curso de formular una política nacional de cambio climático. Después de la iniciativa prometedora con la formulación del Mecanismo Nacional de Adaptación al Cambio Climático (MNACC) entre 2005 y 2007 desde el nivel del gobierno central no ha habido ningún impulso hacia la ACC.
El departamento del Beni muestra mayores avances en la ACC que la región del Altiplano norte.
A nivel de la Gobernación del departamento de La Paz, no existen ni políticas ni programas enfocados a la adaptación al cambio climático. La presencia institucional del tema cambio climático en su estructura es muy débil.
En el Beni, como consecuencias de la ocurrencia de dos inundaciones fuertes durante los últimos años (2008/09 y 2014), la Gobernación cuenta con una estructura para la atención de desastres. Al parecer, los desastres tienen el potencial de fomentar procesos de aprendizaje y de iniciar ciertas actividades.
Carpas de damnificados en Guayaramerín a seis meses de las inundaciones de comienzos de 2014
Hay una profunda crisis de las políticas públicas a nivel de país.
Existe una profunda crisis de las políticas públicas en el país que dificulta el diseño y la implementación de políticas, programas y proyectos de adaptación al cambio climático. Esta realidad se manifiesta a través de un proceso fuerte de desinstitucionalización, tendencias de re-centralización, que no necesariamente respetan la institucionalidad formal y una pérdida de cultura y costumbre de planificación, que desde la implementación de la Participación Popular había tenido notables avances.
El proceso de desinstitucionalización es caracterizado por la falta de políticas públicas bien definidas y el poco respeto por vías formales en el relacionamiento entre niveles político-administrativos y grupos de interés para la atención a la población. Se constata también un bajo grado de respeto a normas y procedimientos establecidos. Predominan relaciones asistencialistas y paternalistas.
Prevención y manejo de conflictos se perfilan como tareas futuras prioritarias.
El tema de la escasez o falta de acceso al agua muy probablemente llevará a un fuerte aumento de situaciones conflictivas, tanto entre comunidades como entre municipios, incluyendo las ciudades de La Paz y El Alto, por lo cual uno de los temas de trabajo importantes en el futuro serán la prevención y el manejo de conflictos.
La construcción de institucionalidad es una precondición necesaria para el fortalecimiento de las capacidades adaptativas.
Existen ejemplos de buenas iniciativas de políticas, programas y proyectos de adaptación al cambio climático que tienen el potencial de servir como puntos de entrada para apoyar o fomentar la adaptación al cambio climático (ACC).
El fomento de la construcción de institucionalidad como tarea subyacente para cualquier iniciativa de adaptación al cambio climático constituye una condición imprescindible. Sin las condiciones mínimas de gobernanza, los intentos de adaptarse a los impactos del cambio climático tendrán escasas posibilidades de ser exitosas. Apoyar la creación y el funcionamiento de mecanismos de coordinación interinstitucional y entre diferentes niveles de gobierno son tareas esenciales.
También en relación a la capacitación se sugiere buscar nuevas formas de capacitación. Considerando que la ACC exige experimentación y actualización constante, las capacitaciones deberían ser diseñadas de forma dinámica, para poder acompañar procesos.
Buenos niveles de gobernanza –entendida como la interacción fluida y oportuna entre el gobierno, la sociedad civil y el sector privado- son elementos cruciales para hacer funcionar estrategias y medidas de adaptación al cambio climático. Sin el adecuado funcionamiento de las instituciones y sin su interrelación con otras instancias de la sociedad, como el sector académico o el gremial, y sin coordinación con la sociedad en general, será muy difícil hacer frente a los impactos del cambio climático de una forma oportuna.
Navegando Futuro-Dirk Hoffmann-LINK.pdf | |
Policy Paper FES-ACC-final.pdf |
2015
En la entrada de la semana pasada “La COP 21 abre el camino a la descarbonización de la economía global” hemos presentado un panorama de primeras reacciones, opiniones y análisis sobre el resultado de la reciente Conferencia Climática, que es el Acuerdo de París.
Ahora que hay este nuevo acuerdo global, el trabajo de implementación puede y debe comenzar. Más allá del texto aprobado, que refleja la diversidad de intereses de los 195 países presentes, el Acuerdo de París manda una señal fuerte al mundo. Este “Mensaje de París” es un llamado a la descarbonización de la economía global, y de todas las economías locales, hasta mediados del siglo.
Cuando el presidente de la reciente Conferencia Climática de París, Laurent Fabius, dejó caer su martillo en forma de hoja para aprobar el “Acuerdo de París”, la sala plenaria estalló en júbilo y largos aplausos.
Mientras que unos hablaban de un día histórico, otros criticaban el acuerdo como insuficiente e inútil. Presentamos a continuación un panorama de las opiniones ofrecidas por actores y observadores y un primer análisis de esta COP 21.
El Acuerdo de París ha sido adoptado; fuente: UNFCCC
[leer más]Todos los participantes de las Conferencias Climáticas conocen la pelea de las pequeñas islas para sobrevivir frente a la amenaza del cambio climático, y como grupo organizado han podido hacer escuchar su voz. ¿Pero qué de los habitantes de las montañas, que también pertenecen a los más vulnerables y marginalizados en el mundo?
Para aumentar la visibilidad de las poblaciones de montaña, el 11 de diciembre se organizó un evento para celebrar el Día Internacional de la Montaña en el programa paralelo de la COP 21 de París. Pero esta no es la única iniciativa: Bajo liderazgo de Suiza se está pidiendo al IPCC, el gremio científico de la Convención Climática, la elaboración de un “informe especial” sobre montañas.
[leer más]Todos los países miembros de la Convención Climática (CMNUCC) tenían hasta el 1º de octubre para preparar sus Contribuciones Previstas Determinadas a Nivel Nacional (INDCs), que de manera agregada, definen el nivel de la mitigación de las emisiones de gases de efecto invernadero frente al reto de limitar el aumento de temperatura por debajo de los 2 °C.
Ya antes del comienzo de la COP 21 el secretariado de la Convención Climática, el Programa de las Naciones Unidas de Medio Ambiente (PNUMA) y la Red de Acción Climática (Climate Action Network – CAN) han presentado sus respectivos análisis sobre el conjunto de las contribuciones nacionales, como base para las negociaciones de París. Es resultado es más que decepcionante: Estamos camino a un mundo 3 o 4 grados más caliente.
[leer más]A pocos días de los atentados terroristas de París hablamos con Pablo Solón* sobre las perspectivas desde Bolivia sobre las negociaciones climáticas de la COP 21 en París, que está comenzando hoy día.
Pablo Solón es el director ejecutivo de la Fundación Solón y parte del Encuentro de la Sociedad Boliviana frente al Cambio Climático. Fue ex-negociador de Bolivia en las Conferencias Climáticas hasta 2011.
“Le Petit Cambodge”, lugar de los atentados del 13 de noviembre, en el día de la Marcha Climática Global en París
[leer más]A pocos días del comienzo de la vigesimoprimera Conferencia Climática de las Naciones Unidas COP 21, miles de personas en todo el mundo están preparando marchas por el clima en señal a los gobiernos reunidos en París de la urgencia de tomar medidas contundentes para la estabilización del clima.
Mientras que en París las activistas están buscando vías alternativas de expresar sus demandas hacia la COP 21 después de la prohibición oficial de la gran marcha climática prevista para el domingo 29 de noviembre, en La Paz y otras ciudades de Bolivia se sigue con la organización de marchas para este día. Presentamos abajo una versión levemente recortada de la convocatoria a la “Marcha global por el clima y la paz” en la ciudad de La Paz.
[leer más]2015
Durante el mes de noviembre, a cuatro semanas del comienzo de la Conferencia Climática COP 21 en París, se desarrollarán varios eventos sobre los efectos del calentamiento global en la ciudad de La Paz, con el objetivo de concientizar y motivar a la población de tomar un rol activo en la mitigación y adaptación al cambio climático.
Una buena parte de las actividades programadas corresponden a la Agenda Climática Municipal de La Paz, lo que muestra el rol importante que pueden y deben jugar las ciudades en la lucha contra el cambio climático. Todo culmina el día 29 de noviembre, fecha de la gran Marcha Climática Global, con una marcha en el centro paceño, al cual convocan tanto el gobierno municipal como los grupos climáticos de la sociedad civil.
[leer más]2015
En una reciente iniciativa del WWF Escocia los líderes de los cinco principales partidos políticos se han comprometido incluir planes para enfrentar el cambio climático en sus propuestas electorales para las elecciones parlamentarias de mayo próximo, dando importancia y visibilidad al tema.
Desde 2009 Escocia, uno de los países más nórdicos de Europa, cuenta con su propia Ley de Cambio Climático, que define una reducción de las emisiones del 42% hasta 2020 y del 80% hasta 2050 (comparado con 1990 como año base).
La calefacción es un tema central en la discusión sobre la mitigación
[leer más]“Evaluación de la participación boliviana en la COP 20 y proyección de la influencia de la sociedad boliviana hacia la COP 21” era el título de un conversatorio organizado por la Fundación Friedrich Ebert (FES) en febrero pasado, cuya memoria está siendo divulgada ahora.
A pocos meses de la COP 21 en París, esta se constituye en un insumo de gran utilidad para promover el debate en el país. Presentamos a continuación reflexiones de Gustavo Guzmán y Dirk Hoffmann acerca de los retos para la sociedad civil boliviana compartidas en aquella ocasión, que todavía son válidas para el actual momento.
[leer más]Lastimoamente ya no es posible suscribirse