En los Andes bolivianos, el cambio climático está afectando el ritmo del retroceso de los glaciares, así como los patrones de lluvia y la velocidad del viento. Estos factores de estrés se suman a las presiones existentes que han llevado a la migración de las zonas rurales a las zonas urbanas de montaña, especialmente a las ciudades de La Paz y El Alto.
Presentamos a continuación la versión en español del artículo “Andes bolivianos: Interacción entre derretimiento glaciar y migración” (“Bolivian Andes: Interplay between glacier melting and outmigration”) de Raoul Kaenzig y Dirk Hoffmann.
La ciudad de La Paz subiendo a las montañas
[leer más]Sin lugar a dudas, la seguridad alimentaria de una creciente población global bajo un continuo aumento de emisiones y los resultantes efectos del cambio climático constituye uno de los principales retos de las próximas décadas, tanto para las familias campesinas, comunidades locales y países enteros.
Para analizar y repensar el rol de la educación superior en la dinámica y las perspectivas sobre el uso de los recursos de la agricultura frente al calentamiento global y los cambios globales en la economía, la política y la demografía, se llevó a cabo en la ciudad de La Paz el Simposio Internacional "La educación resiliente de recursos agrícolas y naturales”, cuyos resultados presentamos a continuación.
[leer más]En el artículo “La Agricultura comunitaria ecológica tejiendo vínculos entre lo urbano y lo rural” se realiza un ejercicio de reflexión sobre lo que representa la resiliencia en la agricultura, basado en la experiencia de un proceso que se desarrolla entre las ciudades de La Paz y El Alto, Bolivia.
Presentamos a continuación la versión abreviada de este artículo ganador del tercer puesto del concurso “Alimentos y pensamiento, siempre en agenda” de 2016, organizado por el Instituto para el Desarrollo Rural de Sudamérica (IPDRS), Fabrizio Uscamayta.
Producción agroecológica en El Alto; fotos cortesía EcoTambo-Tejiendo transiciones
[leer más]Un nuevo artículo publicado en la revista Nature Communications muestra como el riesgo de la auto-amplificación de la pérdida del bosque amazónico aumenta de forma no-linear con la intensificación de la época seca.
“Nuestros resultados indican que sequías más frecuentes tienen el potencial de desestabilizar grandes partes del bosque amazónico”, concluyen los autores del estudio, que muestra como la disminución de las precipitaciones durante la época seca y la resultante pérdida de bosque actúan en un círculo vicioso en la Amazonía.
[leer más]¿Cómo podemos entender la relación entre el discurso de la adaptación al cambio climático y los proyectos de desarrollo a gran escala emprendidos por el Estado boliviano?, es la pregunta guía para la investigación de Brett Buckingham, investigador estadounidense con un BA en geografía de la Universidad de California en Berkeley.
Buckingham pasó varios meses en el país para la investigación de su tesis de honor, que enfoca en la Amazonía boliviana y describe como la “adaptación” al cambio climático es parte de un discurso de desarrollo neoliberal en Bolivia. Presentamos a continuación la traducción de un resumen extenso preparado por el autor.
Casas nuevas en pilotes en el Beni
[leer más]2016
Una noticia ha recorrido el mundo: La ciudad de La Paz, sede de gobierno, y nombrada “ciudad maravillosa” por las redes sociales, se ha quedado sin agua. Lo novedoso: esta vez es la Zona Sur que sufre las mayores consecuencias, y no los barrios marginales de El Alto, como ya se había hecho costumbre a finales de la época seca.
Lo que está siendo presentado por algunos políticos y medios de comunicación como una gran sorpresa y consecuencia del derretimiento de las nieves eternas causado por el calentamiento global, en realidad no es ni sorprendente, y tampoco se debe al derretimiento glaciar.
Laguna Milluni, noviembre de 2009
[leer más]2016
El Klimablog comenzó su publicación en línea un 11 de diciembre, Día Internacional de la Montaña del año 2011 y hoy se está acercando a su quinto aniversario.
Durante estos cinco años, hemos mantenido un ritmo semanal con una nueva entrada al Klimablog cada lunes, que a partir de ahora se cambiará a un ritmo de entradas mensuales, cada primer lunes del mes.
[leer más]Según el estudio científico “Cambio glaciar y el riesgo de desbordes de lagunas glaciares en los Andes bolivianos” (Glacier change and glacial lake outburst flood risk in the Bolivian Andes) publicado en la revista científica The Cryosphere la semana pasada, y cuya elaboración contó con la participación del Instituto Boliviano de la Montaña – BMI, los glaciares bolivianos se han recogido un 43% entre 1986 y 2014.
A través de la formación de lagunas glaciares y los cambios en los ciclos hidrológicos resultantes del retroceso glaciar, se pone en peligro a muchas comunidades de alta montaña, constatan los autores. Publicamos a continuación la nota de prensa preparada por la Unión Europea de las Geociencias (EGU).
Glacier and Laguna glaciar en los Andes bolivianos; crédito: Simon Cook
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En presencia del director de la película, Pieter Van Eecke, el próximo lunes 24 de octubre se estrena “Samuel en las Nubes” en La Paz.
La película retrata el cambio climático a través del testimonio de Samuel, el antiguo operador del lift de esquí del Chacaltaya, cuya familia ha vivido en las montañas nevadas por generaciones.
[leer más]2016
El reciente anuncio del presidente boliviano Evo Morales que una empresa italiana había concluido los estudios iniciales para el proyecto de la represa El Bala en la Amazonía boliviana, ha provocado una polémica sobre la dimensión, la utilidad y sus probables impactos sociales y ambientales.
A continuación, el director e investigador del Instituto Alternativo, Roger Cortéz Hurtado, nos proporciona el resumen de la información disponible sobre este proyecto que resulta el mayor encarado por el Estado boliviano desde su nacimiento.
Las maravillas del Parque Nacional Madidi están en peligro por los proyectos energéticos.
Llama la atención la facilidad con que se ha encendido y extendido la discusión colectiva respecto a la necesidad, oportunidad y manera de llevar adelante un gigantesco proyecto de generación hidroeléctrica en la cuenca amazónica boliviana. Antes de que el presidente boliviano anunciara el 14 de julio pasado que la compañía italiana “Geodata” había concluido los estudios iniciales respecto a la represa del Bala, ya se habían escuchado diversas voces de alarma, debido a que se temía que dicha obra dañaría a Pilón Lajas, reserva de la Biosfera y tierra comunitaria, y al Parque Nacional Madidi, declarada como la mayor reserva mundial en biodiversidad.
La alarma escaló rápidamente, porque solo al cabo de dos días de ese anuncio el Gobierno decretó contratar el estudio para el diseño final de construcción de dos represas, El Chepite y el Bala, con un costo de unos 6.000 millones de dólares y con una capacidad estimada de generar alrededor de 3.600 Megawatts. No ejerció ningún efecto tranquilizador que Evo Morales, primer mandatario del país, anunciase que el estudio estimaba una afectación “menor al 2%” en términos territoriales.
El Instituto Alternativo, una red de investigadores bolivianos y la Fundación Friedrich Ebert, filial boliviana, organizaron el primer conversatorio especializado sobre el proyecto de El Bala, realizado en la ciudad de La Paz, el 29 de julio, donde se consideró la información disponible sobre este proyecto que resulta el mayor encarado por el Estado boliviano desde su nacimiento.
El desarrollo del conversatorio está registrado en la red con deficiencia de video y audio. Aquí intenta presentarse una revisión resumida de lo que se planteó en el encuentro, junto con una actualización del desenvolvimiento del debate en los siguientes días.
Promesas y realidades.
Respecto a la localización, las hidroeléctricas se construirían sobre el río Beni: El Chepete, a 70 kilómetros aguas arriba de Rurrenabaque, en La Paz; y El Bala, en las proximidades del tramo conocido como el Estrecho de El Bala, sobre el río Beni. El embalse del aprovechamiento tendrá un nivel máximo en la cota 400 msnm, una superficie inundada de unos 679,9 kilómetros cuadrados y un volumen de 37,78 km³
Las autoridades aseguran que las dos represas, que son parte de un plan para invertir unos 27.000 millones de dólares en proyectos energéticos, hasta el 2025 y generar más 8.000 Megawatts, significarán:
- Un ingreso anual de unos 1.250 millones de dólares por la exportación y distribución al mercado interno;
- Duplicación de la capacidad de generación eléctrica actual de Bolivia;
- Área de embalse “moderada” de unos 773 km², respecto a estimaciones previas;
- Preservarán las áreas protegidas, con un área de inundación de unos 180 km², lo que significa un 1,9% de impacto en las áreas protegidas.
Agregan a lo anterior, que se incrementaría la navegabilidad del río Beni y que los embalses incrementarían el atractivo turístico de la región.
El Río Beni con una parte del área potencialmente inundada.
Preocupaciones y temores
Las preocupaciones y temores ante el proyecto pueden resumirse en lo siguiente:
- Escasa transparencia en el manejo de contratos, estimaciones de costos y proyecciones económicas (mercados energéticos, tiempo de vida de las represas, costos de mantenimiento y otros);
- Manejo especulativo de las formas de consulta social (referendo departamental, consulta exclusiva a pobladores de la zona);
- Acelera el cambio climático a través de la generación de metano, debido la descomposición de materia orgánica en las áreas de inundación;
- Perjudica y desarraiga a las poblaciones y pueblos de la región;
- Afecta críticamente a la diversidad biológica y altera los ciclos biológicos (peces, migración, desove, aves y mamíferos);
- Altera los ciclos de lluvias y algunas grandes represas terminan sin agua suficiente;
- La afectación de “sólo el 2%” por la inundación de la represa se refiere exclusivamente a los efectos directos, no los indirectos, que se multiplican;
- El gobierno se niega a estudiar la viabilidad de las energías renovables que, al estar basadas en tecnología, aumentan su efectividad de manera exponencial;
- Se alientan expectativas carentes de estudios y fundamentos (“potencia energética regional”);
- Se impulsan y construyen obras con dudosa viabilidad y alta vulnerabilidad a la reproducción y fomento de prácticas irregulares e ilegales.
Formas de vida en peligro de extinción.
Preguntas y más preguntas
Estas y otras inquietudes se reflejaron en las exposiciones de los especialistas Mario Bejarano, Carlos Molina y Pablo Solón.
En el conversatorio, la Fundación Solón expresó las siguientes preguntas que reflejan algunas de las preocupaciones que acarrea el proyecto:
¿Cuándo hará público el gobierno el informe de Geodata sobre los “Estudios de Identificación del proyecto hidroeléctrico del Bala”?
¿Por qué en la página web de ENDE, donde figuran todas las convocatorias internacionales de estudios, no se encuentran los términos de referencia del Estudio a Diseño Final del proyecto que se acaba de suscribir el 27 de julio pasado?
Se dice que el proyecto hidroeléctrico de El Bala y Chepite tendrá una potencia de 3.676 megavatios (MW) ¿Cuál será la cantidad de energía que producirá en kwh?
¿Cuál será el costo total de inversión del proyecto tomando en cuenta todos los estudios, y cuánto será el costo de operación y mantenimiento anual del proyecto?
¿Cuál será la superficie de los embalses de El Bala y el Chepete y a cuantas hectáreas de bosques afectará?
¿Qué impactos indirectos tendrá el proyecto del Bala sobre la deforestación y la biodiversidad?
¿Cuáles serán los impactos del proyecto de El Bala sobre el ciclo de las lluvias en la región y otras áreas del país?
¿Cuál el volumen e impacto de la sedimentación sobre la hidroeléctrica del Chepite y el Bala en términos económicos, ambientales y de sostenibilidad del proyecto?
¿Cuáles son las emisiones de gases de efecto invernadero, en particular metano (CH4), del proyecto hidroeléctrico de El Bala? ¿Se ha tomado en cuenta que estas pueden ser el doble de las que emite una generadora eléctrica a carbón?
¿Se ha tomado en cuenta el cambio climático y la probabilidad de fuertes precipitaciones que lleven a inundaciones? ¿A cuánto podría ampliarse el área inundable de los embalses en situaciones de extremas lluvias?
¿Cuantas comunidades indígenas y familias será necesario relocalizar y lo más importante estas comunidades han sido informadas y serán consultadas?
¿Cuál será el impacto sobre los peces y las poblaciones que viven de la pesca? ¿Qué medidas de mitigación y reparación se prevén?
¿Por qué el gobierno ha priorizado la generación de electricidad en base a mega hidroeléctricas en vez de promover la generación de energía eólica y solar aprovechando los fuertes vientos y la alta radiación solar en varias regiones del país?
¿Se han hecho estudios para ver cuanta energía solar, eólica y de pequeñas hidroeléctricas se podría generar con los 6.000 millones de dólares que se piensan invertir en El Bala?
Para que la consulta sobre la inversión de 6.000 millones de dólares en El Bala sea productiva, transparente y no dirigida ¿no se deberían incluir otras opciones alternativas a El Bala? ¿Acaso estamos en una situación donde sólo existe una única opción para la inversión de los 6.000 millones de dólares?
La discusión no ha hecho más que comenzar y promete animarse extraordinariamente con el transcurso de las semanas.
Bejarano_El Bala.pdf | |
Molina290716.pdf | |
Solón_Alternativas al Bala.pdf |
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